A partir de 2025, los pequeños negocios con una facturación anual inferior a 10 millones de euros experimentarán una disminución en los tipos impositivos del Impuesto de Sociedades. Esta medida se implementará de forma progresiva durante varios años, beneficiando especialmente a las microempresas.
2025: Los primeros 50.000 euros de beneficio tributarán al 21%, mientras que el resto estará sujeto a un tipo del 22%.
2026: Los primeros 50.000 euros de beneficio bajarán al 19%, y el resto al 21%.
2027: Los primeros 50.000 euros se gravarán al 17%, y el resto al 20%.
2025: Un tipo fijo del 24%.
2026: Reducción al 23%.
2027: Descenso al 22%.
2028: Bajada al 21%.
2029: Estabilización en el 20%.
Este esquema de reducción fiscal se centra en fomentar la reinversión de beneficios, estimular la competitividad y dar un respiro económico a los pequeños negocios, que representan una parte significativa del tejido empresarial del país.
Empresas con una facturación inferior a un millón de euros anuales serán las más beneficiadas. Para este segmento, la introducción de tipos diferenciados para los primeros 50.000 euros de beneficio busca reducir drásticamente la presión fiscal, incentivando la reinversión en áreas clave como tecnología, formación y expansión.
Negocios con una facturación de hasta 10 millones de euros también disfrutarán de una bajada progresiva de impuestos. Este alivio fiscal permitirá a las PYMES destinar más recursos al fortalecimiento de su competitividad y sostenibilidad.
Muchos autónomos que operan bajo una SL podrán notar un impacto positivo en su rentabilidad. Esto es especialmente relevante para sectores con márgenes ajustados, que ahora podrán reinvertir más beneficios en su actividad.
Con una menor carga fiscal, las empresas dispondrán de más capital para reinvertir en crecimiento. Esto incluye la adquisición de nuevos equipos, contratación de personal, ampliación de instalaciones o mejora de productos y servicios.
Al reducir costes fiscales, las empresas tendrán más margen para ofrecer precios competitivos, mejorar sus procesos y fortalecer su presencia en el mercado.
Esta reforma proporciona a las microempresas y PYMES un horizonte fiscal más predecible, permitiéndoles planificar sus finanzas con mayor seguridad a largo plazo.
Para sacar el máximo provecho de esta reforma fiscal, es crucial que las empresas tomen medidas estratégicas desde ahora. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos:
Analiza los ingresos, gastos y beneficios proyectados para los próximos años. Esto te permitirá identificar cuánto podrías ahorrar con los nuevos tipos impositivos.
Llámanos y nuestros asesores especializados te ayudarán a optimizar la tributación de tu empresa, identificando las mejores oportunidades de inversión basadas en los ahorros generados.
Define cómo destinarás los recursos adicionales. Considera áreas como digitalización, marketing, formación o diversificación de productos.
Si tu facturación está cerca de los límites establecidos (1 millón o 10 millones de euros), evalúa cómo gestionar ingresos y gastos para mantenerte en el tramo más favorable.
Esta medida no solo beneficiará a las empresas individuales, sino también al tejido empresarial en su conjunto. Al fomentar el crecimiento y la competitividad de las microempresas y PYMES, se espera que aumenten las oportunidades de empleo, la innovación y la contribución económica de este segmento al PIB nacional.