El Gobierno de España ha aprobado recientemente una reforma del subsidio de desempleo, con el objetivo de mejorar la protección social de las personas desempleadas y fomentar su reincorporación al mercado laboral. Esta reforma introduce cambios importantes en las cuantías, los requisitos y la duración de la prestación, con el fin de adaptarla a las necesidades actuales del mercado laboral y ofrecer un mayor apoyo a los colectivos más vulnerables.

Aumento de las cuantías:

Uno de los aspectos más destacados de la reforma es el aumento de las cuantías del subsidio, que se aplicará de forma progresiva en función de la duración del desempleo:

Primeros seis meses: Se establece una cuantía inicial del 95% del IPREM (unos 570 euros mensuales), lo que supone un incremento de 90 euros respecto a la situación anterior.
Siguientes seis meses: La cuantía se reduce al 90% del IPREM (unos 540 euros mensuales), manteniendo un aumento significativo frente a los 480 euros que se cobraban hasta ahora.
A partir del decimotercer mes: La cuantía se fija en el 80% del IPREM, como hasta ahora (unos 480 euros mensuales).
Mayores de 52 años: El subsidio para este colectivo también se incrementa, llegando al 95% del IPREM durante los primeros seis meses, al 90% en los siguientes seis meses y al 80% el resto del periodo.
Eliminación de la penalización: Se elimina la penalización del 10% que se aplicaba a los trabajadores con contratos a tiempo parcial, lo que supone un aumento de la cuantía para este grupo.

Compatibilidad con el trabajo:

Otra de las novedades importantes de la reforma es la posibilidad de compatibilizar el cobro del subsidio con un empleo a tiempo parcial. Esta medida tiene como objetivo facilitar la transición de los desempleados al mercado laboral y fomentar la contratación a tiempo parcial.

Condiciones: La compatibilidad estará sujeta a ciertas condiciones, como que la suma de las dos rentas no supere el 75% del salario mínimo interprofesional.
Modulación de la cuantía: La cuantía del subsidio se modula en función de la jornada del empleo desempeñado:
80% del IPREM para jornada completa.
60% del IPREM si se trabaja menos del 50% de la jornada laboral.
Incompatibilidad si el salario del empleo es superior al 225% del IPREM (unos 1.500 euros mensuales).

Otras medidas relevantes:

La reforma del subsidio de desempleo también incluye otras medidas relevantes, como:

Eliminación del mes de espera: Se elimina el mes de espera que se exigía actualmente entre el cese de actividad y el inicio del cobro del subsidio.
Fin de los subsidios parciales: Se eliminan los subsidios parciales, por lo que todos los beneficiarios cobrarán la ayuda completa, sea cual fuere su jornada cuando trabajaban.
Ampliación de la duración máxima: Se amplía la duración máxima del subsidio de 24 a 30 meses.
Programa de acompañamiento: Se crea un programa de acompañamiento individualizado para los parados de larga duración.
Mejora de la formación: Se mejora la formación para el empleo, con el objetivo de facilitar la reincorporación de los desempleados al mercado laboral.
Nuevas ayudas: Se crean dos nuevas ayudas para migrantes retornados y víctimas de violencia machista.

Ampliación de la cobertura:

La reforma también amplía la cobertura del subsidio a nuevos colectivos, incluyendo:

Menores de 45 años sin responsabilidades familiares: Hasta ahora, este grupo estaba excluido del subsidio, pero la reforma lo incluye para garantizar una red de protección social más amplia.
Trabajadores eventuales agrarios: Estos trabajadores, que suelen tener contratos de corta duración y estacionales, ahora podrán acceder al subsidio en caso de desempleo.
Personas trabajadoras transfronterizas de Ceuta y Melilla: Se reconoce el derecho al subsidio a los trabajadores que residen en Ceuta y Melilla y que han desarrollado su actividad laboral en territorio nacional o marroquí.
Personas con periodos cotizados inferiores a 6 meses: Aquellas personas que no hayan cotizado lo suficiente para tener derecho a la prestación contributiva por desempleo ahora podrán acceder al subsidio, siempre que carezcan de responsabilidades familiares.

Requisitos generales:

Para acceder al subsidio de desempleo, todos los beneficiarios deberán cumplir los siguientes requisitos generales:

Estar inscritos como demandantes de empleo en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
No tener rentas superiores al 75% del salario mínimo interprofesional (en 2024, 900 euros mensuales).
No haber rechazado un puesto de trabajo o una formación adecuada.

Duración del subsidio:

La duración del subsidio varía en función de la situación personal del beneficiario y de los periodos cotizados:

3, 4 o 5 meses: Si se ha cotizado por esos periodos.
6 meses: Si se ha cotizado entre 6 meses y un año y no se tienen responsabilidades familiares.
21 meses: Si se ha cotizado entre 6 meses y un año y se tienen responsabilidades familiares.
30 meses: Máximo para todos los beneficiarios.

Condiciones especiales:

Mayores de 52 años: Mantienen la sobrecotización del 125% de la base mínima para acceder al subsidio específico para este colectivo.

Entrada en vigor:

Se espera que la reforma entre en vigor en los próximos días, antes del 20 de mayo de 2024, para que España pueda cumplir con los requisitos establecidos para la recepción del cuarto pago de los fondos europeos.

Impacto de la reforma:

La reforma del subsidio de desempleo se espera que tenga un impacto positivo en la protección social de las personas desempleadas y en la dinamización del mercado laboral. Se estima que beneficiará a más de un millón de personas y supondrá un desembolso de 1.500 millones de euros por parte del Gobierno.

Críticas a la reforma:

A pesar de los aspectos positivos de la reforma, también ha recibido algunas críticas, principalmente centradas en:

Insuficiencia del aumento de las cuantías: Algunos sectores consideran que el aumento de las cuantías del subsidio no es suficiente para garantizar un nivel de vida digno a las personas desempleadas.
Penalización a los parados de larga duración: La reforma mantiene la penalización a los parados de larga duración, que cobran una cuantía inferior al resto de beneficiarios.
Complejidad del sistema: El sistema de compatibilización del subsidio con el trabajo a tiempo parcial se considera complejo y difícil de entender.

Conclusiones:

La reforma del subsidio de desempleo es una medida importante que busca mejorar la protección social de las personas desempleadas y fomentar su reincorporación al mercado laboral. Si bien la reforma tiene aspectos positivos, también hay algunas críticas que deben ser consideradas. Será necesario evaluar el impacto de la reforma a largo plazo para determinar su eficacia y si es necesario realizar ajustes en el futuro.

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